Reflexión de una profesora del IEMS sobre el regreso a clases después del sismo

Reflexión sobre el inminente y esperado regreso a clases después del sismo ocurrido el 19 de septiembre del año en curso.

Primero y como eje de esta reflexión, creo que como docentes debemos tener, ante estas circunstancias, el compromiso de crear las condiciones óptimas para poder continuar con nuestras labores académicas, esto en un ambiente que propicie la convivencia, el acompañamiento y especialmente la seguridad (en la medida de lo posible).

Tomando en cuenta que la población escolar (estudiantes, docentes, administrativos, policías, gente de limpieza y padres de familia) ha sido afectada por los sucesos que ocurren en nuestro país, de manera directa o indirecta, sería muy irresponsable actuar como si nada hubiera pasado.

¿Tenemos que retomar nuestras actividades? Si, es definitivo; sin embargo, este retorno debe ser empático y sensible ante todos los actores que hacemos posible este sistema; tenemos diferentes y hasta contrarias formas del como enfrentamos lo sucedido y como lo procesamos. Esto podría parecer muy complejo de enfrentar; pero considero que hay una cosa que todos necesitamos y nos une desde la diversidad y es la certeza de poder habitar con seguridad ese espacio llamado escuela.

Cada uno de nosotros hemos construido nuestro actuar ante los sismos en diferentes etapas: la emergencia misma y el esperar en áreas de seguridad; segundo, la urgencia de irnos con nuestros seres queridos y el cómo pienso a un ciudadano útil y consiente de las necesidades de los otros-compatriotas y por último como retomamos y construimos nuevamente la certeza de cohabitar este pedazo de tierra que tiembla, tiembla y tiembla. En nuestro caso, cómo construimos nuevamente la certeza de la calidez y seguridad de las paredes que nos rodean en la prepa Felipe Carrillo Puerto, en los salones, en los cubos, en los pasillos, etc.

Se me ocurre comenzar con vernos solamente los docentes y administrativos, para escuchar de boca de alguien competente las condiciones del plantel, para poder comenzar la reconstrucción de la confianza en esas estructuras y poder transmitirlas a los demás, empezando por los estudiantes y en un momento posterior pero inmediato a padres de familia. Esto lo pienso para evitar en la medida de lo posible versiones alarmistas (que ya existen) sobre las condiciones del plantel. Y como dije al principio poder crear las condiciones óptimas para poder retomar las actividades.

Además, este espacio entre docentes y administrativos nos permitiría hacer una revisión o creación necesaria de protocolos ante una situación de emergencia y mejorar nuestro actuar ante sucesos que no podemos predecir pero que son altamente probables.

Somos una comunidad educativa que debe enfrentar las vicisitudes esperando aprender para enseñar, y con eso abrazarnos para crear lazos que nos ayuden a prepararnos ante lo que nos plantea la implacable naturaleza.


Atentamente DTI Ericka Villalpando Luna esperando verlos pronto.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario